De política y violencia

Ni haré publicidad ni hablaré en contra de los partidos, aunque no sera por falta de ganas. La cosa es que hace un par de dias, en una de esas mañanas en las que pongo la radio nada más levantarme, empiezan a sonar las noticias y entre ellas hay una que me llamó la atención: la Ley Sinde vuelve a la carga el próximo día 9 de Febrero con la nueva votación de Ley de Economía Sostenible.

Y es que estaba claro que una ministra controlada por una empresa privada que ansia control sobre la red no se iba a rendir así como así en su esfuerzo de aprobar la Ley Sinde a pesar de que la última votación dijeron que se podía aprobar la Ley de Economía Sostenible si no tenía el apendice de la Ley Sinde. Así que para demostrar que no ceja en su empeño, la señora ministra presentó un nuevo proyecto a última hora en el día de final de plazo para que pudiera entrar en la votación a realizar el día 9.

Desde aqui le deseo que se lleve otro batacazo y que su Sinde siga viendo su futuro en el fondo de un cajón. Aunque esta claro, que a ella no le pagan por dejar internet libre y respetar los derechos humanos constitucionales.

En otro orden de cosas, después de escuchar la noticia de la nueva votación, conecto internet y lo primero que me llega al correo es un enlace a un evento de Tuenti, esa red social. El evento en cuestión nos habla de una paliza a un joven a la salida de una conocida discoteca de Granada a manos de un grupo cuantioso de chicos Y chicas. El motivo: parece que el chico le digo algo a una de las chicas que no le sentó bien a ninguno del grupo. En el video que presenta un testigo y que esta subido a Youtube como prueba del delito, se ve como consiguen tumbarlo y varios empiezan a soltarle patadas y puñetazos hasta que uno se mete a intentar que lo dejen en paz, momento a partir del cual sera un chico y una chica los que empezaran a ensañarse con el caido con patadas, puñetazos e incluso usando como arma los tacones que llevaba en la mano en una busqueda de hacer daño.

Según cuentan la noticia los medios digitales, el agredido una vez le dejaron en paz, se levantó, prestó declaración a los policias que fueron al lugar y sin presentar denuncia alguna se marchó a casa con un par de amigos que estaban con él.

De estos dos hechos me surgen varias preguntas: ¿el ser humano realmente solo sabe recurrir a la violencia y al abuso de poder para conseguir lo que desea? ¿Tan antinatural resulta la discusión dialectica o la busqueda de un bien común no perjudicial para nadie que siempre es lo último a lo que se recurre?

Si la respuesta a las dos preguntas en un rotundo SÍ, quizas más que preocuparnos de dejarles a nuestros hijos un futuro con un planeta limpio, deberiamos pensar en legar a las generaciones futuras una sociedad que aprenda a obviar la violencia o la imposición de normas que no hacen más que contradecir leyes superiores.