Sobre Serrael

Estudiante tópico universitario, hace un intento de ir terminando a su ritmo Arquitectura Técnica, tambien llamada Ingenieria de la Edificación en su versión europea. Tampoco descuida su parte mas aficionada al ocio friki y a la tradicion universitaria de hace siglos, la llamada Tuna.

Claro esta que semenjante sujeto es raro que haya conseguido confluir en si mismo tales aficiones, lo cual da aun mas rareza a su estatus al saber que en sus gustos musicales priman los géneros del Folk Metal o el Rock Transgresivo. Aún asi, no queda desmerecida su capacidad para encontrar amigos por donde pisa.

Hablando un poco del pasado y del paso por internet, esta tendencia a crear sitios empezo en su dia con un space de los de msn, alla por incios de siglo. El space del Rincón sin Encanto adquirio una pequeña fama que hoy en dia resultaria ridicula, pero que dio el animo para ir llenando el sitio cada vez con mas cosas, hasta el punto que llego a reventar de tan lleno como estaba.

Claro esta que la explosion no dejo intacta la pequeña fama y poco a poco los restos del space fueron quedando abandonados a su suerte en los distintos puntos de internet donde habian tenido a bien terminar cayendo. Sin embargo, lejos de desanimar por completo al autor, decide intentar revivir el sitio sin demasiado exito, hasta que meses despues decide comenzar sus andanzas en los blogs, abriendo asi La Frontera Onírica, que durante un par de años fue acumulando entradas esporadicas en un intento de acumular la voluntad suficiente para comenzar la actualizacion regular y periodica.

Finalmente seria a final del verano de 2010 cuando la cantidad de voluntad alcanzo los niveles necesarios, comenzando asi una corta epoca de actualizacion diaria antes de que surgiera la oportunidad nada despreciable de montar un blog con su gran amigo Eric. Y asi llegamos aqui, El Mirador en la Frontera, donde se unen ambos blogs para dar rienda suelta al afan bloguero de ambos en una colaboracion que internet llevaba tiempo esperando.

En cuanto a lo que respecta al futuro... pues Tiempo al tiempo que no hay prisa.